La franqueza, es acerca de reconocer ese centro tuyo, que es infinito en amor y en pureza. Es tu expresión sincera de lo que realmente eres.

En el corazón del ser evolucionado y puro, reside la verdad.

¿En dónde comienza la franqueza?

Sinceridad es saber que lo que tú realmente eres, es pureza y expresión ilimitada de tu corazón.  Esta es la voz y el poder de tu ser superior, de tu alma. Así es como la franqueza o la sinceridad comienza, es en tu corazón expresando tus verdaderas cualidades y viviendo desde ellas y a través de ellas.

Cuando se vive con franqueza o con la verdad, todo es real, las ilusiones se disuelven y el velo ya deja de ser un velo. En lugar de eso, se transforma en un portal de conexión y de experiencia de la unidad, de la verdadera existencia. 

La verdad o la franqueza luego se convierte en estado de ser y de hacer, y ese hacer es sin esfuerzo. Es fácil, es agradable, es generoso. 

Cuando se vive a través de la franqueza, las relaciones se convierten en una comunión de dos seres resaltando sus realidades, y el poder interior de cada uno de ellos. 

La sinceridad

La sinceridad es un imán para la grandeza del ser, para atraer la grandeza del ser o para llevarte a vivir tu máximo potencial. Es como una piedra o cristal, a través del cual la realidad es vista y experimentada más claramente y de una manera más significativa. 

La veracidad es la reconexión, primero con tu verdadero ser y luego en el relacionarte con todo lo demás, con los otros o con el todo. 

La sinceridad es alinearte con las cualidades de tu ser puro y solo de esa manera podrás ser capaz de experimentar la verdad, en cada interacción, en cada realidad, en cada expresión y potencial que expreses.

Al vivir en consonancia con tu verdad experimentas libertad y paz en tu vivir. Esta sensación de libertad te permite imbuirte en tu poder interior por el hecho de traer a la vida tu mayor tesoro, tu verdadero yo.

La verdadera existencia se vive por medio de la mente y el corazón, y también del cuerpo. La mente ordena con sus pensamientos y el corazón actúa con su amor y su verdad infinita. 

El cuerpo es donde se experimenta la vida. Recuerda que tu corazón es el motor de lo que manifiestas puesto que tiene acceso a la Divinidad.

La verdad en si misma solo puede ser alcanzada dentro de uno mediante la más profunda meditación y conciencia.

Buda